Todos los seres humanos tenemos la capacidad de experimentar diversas emociones, y cada cumple una función importante.
¿Qué son las emociones?
Las emociones son respuestas automáticas que ocurren ante eventos internos, como pensamientos, o externos, como lo que sucede a tu alrededor. Tienen varios componentes y son tan repentinas que suben y bajan como las olas del mar. Algunas emociones son universales, como el enojo, asco, miedo, alegría, tristeza, amor, celos, y envidia.
No podemos controlar las emociones directamente
No podemos seleccionar una en específico y luego puff sentirla. Tampoco, podemos cambiarla con fuerza de voluntad por más que deseamos hacerlo así que el “echale ganas” no funciona. En resumen, podemos elegir cómo actuar, pero no cómo sentir.
Recuerda: Siempre hay un estímulo que provoca una emoción. Algo sucede y eso debe captar tu atención.
Biología de las emociones
Dos partes clave del cerebro participan en el manejo de las emociones: la amígdala y los hemisferios cerebrales.
La amígdala procesa la información y prepara la respuesta emocional.
El hemisferio derecho es más dominante en las emociones desagradables, mientras que el hemisferio izquierdo está relacionado con las emociones placenteras y la percepción de expresiones faciales y corporales.
Componentes de las emociones
Dos partes clave del cerebro participan en el manejo de las emociones: la amígdala y los hemisferios cerebrales.
Las emociones tienen varios componentes que están interrelacionados. Cambiar uno de ellos puede modificar toda la respuesta emocional. A continuación, los exploramos:
1. Eventos desencadenantes: Son sucesos que ocurren justo antes de que comience una emoción, pueden ser externos por ejemplo que tu amigo te diga algo malo, que te despidan de tu trabajo, que llueva el día de tu boda, etc., o internos como pensamientos, dolor de cabeza, etc.
2. Atención: Para que exista una respuesta emocional es relevante que el evento desencadenante capte al menos parte de tu atención.
Ejemplo: vas por la calle y alguien te grita alguna grosería, pero tú no lo escuchas por estar usando el celular, como el evento no captó tu atención no hay respuesta emocional.
3. Interpretación: Frecuentemente lo que desata una emoción, es tu interpretación del evento desencadenante, no el evento en sí.
Ejemplo: Estás en el centro comercial y ves a tu pareja con su hermana. Mueves los brazos y gritas su nombre, pero él sigue caminando y no responde a tu saludo. Interpretas que eso significa que no te quiere y que te está castigando por algo, lo que te hace sentir triste y molesta. Sin embargo, si interpretas que el centro comercial estaba lleno de gente y había mucho ruido, por lo que tu pareja no te vio ni escuchó, probablemente no te sentirías triste ni molesta.
¡PRESTA ATENCIÓN A LAS SUPOSICIONES, PUEDEN HACER DAÑO!
4. Vulnerabilidad: Son sucesos que hacen que una persona se encuentre sensible a un evento desencadenante.
Ejemplo 1: No haber dormido lo suficiente, estar enfermo o con alguna molestía física, estar crud@, etc.
Ejemplo 2: Imagina estar experimentando una incomodidad física intensa en tu garganta que te ha impedido descansar los últimos 5 días, tienes sueño y te sientes cansad@ es más probable que te molestes si alguien te pide algo.
5. Cambios en el sistema nervioso: Los nervios periféricos y la médula espinal envían señales a los músculos para que se contraigan o relajen.
Ejemplo: Aumento en el ritmo cardíaco, y la presión arterial, sudoración, náusea, vómito, mareo.
6. Experiencias: Las emociones casi siempre están asociadas con sensaciones físicas y el impulso de actuar.
Ejemplo: El miedo puede provocar un nudo en el estómago y/o una respiración agitada.
7. Expresiones: Las emociones se comunican a través de expresiones faciales, corporales o verbales.
Ejemplo: Fruncir el ceño, apretar las manos en forma de puño, expresiones verbales como “Te amo” “Te odio” “Lo siento”.
8. Acciones: Las emociones preparan al cuerpo para actuar.
Ejemplo: Alejarse de un abismo, besar, correr hacía alguien, etc.
¡RECUERDA: CUANDO LAS ACCIONES CAMBIAN LAS EMOCIÓN TAMBIÉN!
9. Nombrar las emociones: Reconocer y nombrar las emociones es esencial para gestionarlas. Este proceso requiere conciencia y práctica.
10. Efectos posteriores: Las emociones afectan nuestra memoria, pensamientos, capacidad cognitiva y comportamiento.
Ejemplo: Cuando estamos enamorados, usualmente tendemos a ver sólo lo positivo en la otra persona e ignorar lo negativo.
¡UFF ESTUVO BUENA LECTURA, TE INVITO A CONTINUAR YA FALTA POQUITO!
Función de las emociones
Te prometo que no existen para molestarte, y por el contrario las necesitamos en nuestro día a día, tienen 3 funciones principales:
Rueda de las emociones
Aquí te comparto una herramienta visual para que puedas conocer más sobre las emociones y cómo identificarlas.
Antes de poder regular tus propias emociones, es fundamental comprenderlas. Puedes hacer dos cosas:
¡GRACIAS POR LLEGAR HASTA EL FINAL! NOS VEMOS EN UNA LECTURA
Bibliografía
Linehan, M. (2015). DBT Skills Training Manual. The Guilford Press.
Linehan, M. (2020). Manual de entrenamiento en habilidades DBT para el/la consultante. Editorial de la Universidad Nacional de la Plata.
Palmero Cantero, F., Guerrero Rodríguez, C., Gómez Iñiguez, C., Carpi Ballester, A., & Gorayeb, R. (2011). Manual de teorías emocionales y motivacionales. Universitat Jaume I.